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Solidaridad con la okupación del Centro Social Okupado (CSOA) Can Vies, Barcelona

 

 


 El 26 de mayo 2014, la policía desalojó el Centro Social OKupado y Autogestionado Can Vies, en el bariro de Sants en Barcelona. El gigantesco dispositivo policial empezó por la mañana y duró unas 9 horas, hasta que finalmente la policía tomó el edificio.
Los okupas estaban preparados y decididos a retrasar tanto como pudieran la operaci
ón policial, ya que conocían de antemano las pretensiones de TMB que, junto con el Ayuntamiento de Barcelona, había movido todo el proceso del desalojo del edificio después de los continuos rechazos del CSOA a aceptar ningún tipo de pacto con las instituciones.

 

No era la primera vez que TMB llevaba el caso a los juzgados, pero el proceso judicial siempre quedaba bloqueado en algún punto. Esta vez el juez dio un ultimátum para el 31 de mayo de 2014 y el Ayuntamiento lo apoyó y dio su consentimiento.

Una vez desalojado el edificio, se empezó con el derribo de una parte de la okupación, con la policía protegiendo las excavadoras y repeliendo a los manifestantes que intentaban acercarse a Can Vies.

 

Sin embargo, el movimiento tenía reservado un destino diferente para Can Vies, diferente de lo que prepararon los protagonistas de la represión. El espíritu luchador de los okupas, que desde el primer momento rechazaron el pacto con TMB, la solidaridad del barrio de Sants (Can Vies lo apoya un amplio sector del barrio, ya que es un centro de lucha y radicalización aceptado ampliamente), las protestas masivas en Barcelona y otras ciudades de España, así como la resistencia de miles de personas, que a pesar de pelotas de goma, lacrimógenos, centenares de identificaciones, retenciones y decenas de detenciones, se quedaron en la calle, levantaron barricadas y se enfrentaron a las fuerzas del orden y obligaron al Ayuntamiento a anunciar el cese del derribo del edificio.

 

El auge de la protesta llegó el sábado 31 de mayo, cuando centenares de personas solidarias se concentraron delante del centro okupado y, junto con los okupas, se pusieron a reconstruir el edificio. Los manifestantes formaron una gran cadena humana que consiguió, en poco tiempo, trasladar a la entrada del Distrito de Sants los escombros del edificio medio derrumbado. Aquella misma noche, se convocó una manifestación en la que participaron más de 10.000 solidarios, quienes, partiendo de diferentes barrios de la ciudad, se juntaron en una manifestación multitudinaria que acabó en enfrentamientos con la policía, retenciones e identificaciones y detenciones, tal y como había pasado en las movilizaciones de los días anteriores. De las más de 65 personas detenidas a lo largo de todos los días de movilizaciones, sólo a dos se les impuso la prisión preventiva (Sergi 'el Casteller', que en estos momentos ya está fuera de la cárcel, e Iván, de nacionalidad italiana).

 

La determinación y el empeño de los okupas, así como el movimiento solidario masivo que acabó movilizando a miles de compañeros en muchas ciudades españolas, no sólo lograron parar temporalmente por lo menos la represión contra el centro okupado en cuestión, sino que transmitieron un mensaje contundente a las élites: las estrategias represivas para aniquilar las resistencias políticas y sociales de los que rechazan los centros especulativos y la imposición de un control social agobiante, pueden verse frustradas cuando se les opone un movimiento de resistencia y de solidaridad colectiva.

 

La lucha por Can Vies, y el hecho de que a través de dicha lucha se consiga mantener bajo el control del movimiento un espacio autogestionado más, constituye un mensaje claro con mucho valor simbólico para todos los que en un ambiente regido por los asaltos agresivos del capitalismo y del estado se enfrentan a una represión cada vez más dura, tanto en Europa como en el resto del mundo: las luchas sociales colectivas y autogestionadas pueden vencer.

 

Desde un espacio que defendemos desde hace 26 años con el apoyo de una red de amigos y solidarios contra los asaltos represivos estatales y paraestatales, y a la espera de una nueva ola de asaltos estatales, tras la operación policial que se llevó a cabo en enero de 2013, expresamos nuestra solidaridad con el centro social okupado Can Vies y con todos los espacios autogestionados que se enfrentan a la represión. ¡Defender estos espacios constituye un deber para todos los que luchan desde abajo por la justicia social, la libertad y la dignidad!

 

DE ATENAS A BARCELONA Y A TODAS PARTES: LOS CENTROS OkUPADOS NO SE TOCAN

 

LIBERACIÓN INMEDIATA DEL MANIFESTANTE ENCARCELADO

 

 

                                                     17/6/14
Asamblea de la ocupaci
ón Lelas Karagiani 37

 

 


 

 

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